¿Qué tipos de mallas metálicas existen para la construcción?

Clasificación de las mallas metálicas según su funcionalidad

Antes de hablar sobre los detalles en la variedad de mallas metálicas disponibles y sus ventajas, es esencial comprender las distintas funciones que pueden cumplir en un proyecto de construcción. Las mallas de refuerzo estructural y las mallas para cerramientos y vallados son dos categorías principales que desarrollaremos a continuación, cada una con aplicaciones específicas y consideraciones de diseño.

Mallas de refuerzo estructural

Las mallas de refuerzo estructural, también conocidas como mallas de armadura, están diseñadas para reforzar y estabilizar estructuras de concreto. Estas mallas se utilizan comúnmente en la construcción de losas, columnas, muros y otras estructuras de hormigón para mejorar su resistencia a la tracción y la flexión, así como para prevenir la formación de grietas.

Mallas para cerramientos y vallados

Las mallas para cerramientos y vallados son diseñadas específicamente para delimitar espacios, proporcionar seguridad y privacidad, y en algunos casos, también pueden tener fines decorativos. Estas mallas se utilizan en proyectos residenciales, industriales y comerciales, así como en aplicaciones agrícolas y de seguridad perimetral.

Materiales utilizados en la fabricación de mallas metálicas

La fabricación de mallas metálicas se realiza a través  de  materiales que no solo aseguren durabilidad y resistencia, sino que también ofrezcan flexibilidad y facilidad de manejo. Entre los materiales más utilizados  se encuentran la ferralla y el alambre galvanizado, muy utilizados para aplicaciones dentro de la industria de la construcción.

Ferralla

La ferralla, conocida también como acero de refuerzo, es un conjunto de barras o mallas de acero que se emplean para reforzar el concreto en la construcción. Este material es fundamental debido a la capacidad del acero para soportar tensiones de tracción, complementando así al concreto, que es resistente a compresiones pero débil en tracción. Entre sus principales características destacan: 

• Alta resistencia a la tracción: La ferralla aporta una resistencia a las estructuras de concreto, permitiéndoles soportar mayores cargas y tensiones sin deformarse.
• Durabilidad: El acero de refuerzo es especialmente tratado para resistir procesos corrosivos, lo que prolonga la vida útil de las estructuras en las que se utiliza.
• Versatilidad: La ferralla puede ser doblada y cortada en múltiples formas y tamaños, lo que permite adaptarla a cualquier diseño estructural, haciendo posible la realización de construcciones complejas y variadas.

Alambre galvanizado

El alambre galvanizado es un tipo de alambre de acero que ha sido recubierto con una capa protectora de zinc para prevenir la corrosión. Este proceso de galvanización extiende notablemente la vida útil del alambre, haciéndolo idóneo para su uso en ambientes exteriores o en situaciones donde la exposición a elementos corrosivos es una preocupación.  Entre las características más importantes destacan: 

• Resistencia a la corrosión: El revestimiento de zinc protege al alambre de acero de los efectos corrosivos del agua y el oxígeno, lo que es esencial para aplicaciones al aire libre o en condiciones húmedas.
• Flexibilidad: A pesar de su resistencia y durabilidad, el alambre galvanizado es notablemente flexible, lo que facilita su manipulación y aplicación en diferentes formas y estructuras dentro de la construcción.
• Costo-efectividad: Comparado con otros materiales resistentes a la corrosión, el alambre galvanizado ofrece una solución más económica sin comprometer la calidad o la durabilidad de las mallas metálicas.

La ferralla y el alambre galvanizado son esenciales en la fabricación de mallas metálicas por sus propiedades únicas que garantizan resistencia, durabilidad, y versatilidad.