Ganado ovino: ¿cómo es la gestión de una explotación para este ganado?

Principales factores a considerar en la gestión de una explotación ovina

Principales factores a considerar en la gestión de una explotación ovina:

Ubicación y tamaño de la explotación

Uno de los primeros aspectos que influye en la gestión de una explotación ovina es la ubicación. Es fundamental elegir un terreno que disponga de acceso a pastos naturales, fuentes de agua y que esté bien comunicado para facilitar el transporte de insumos y productos. Además, la extensión de la finca debe ser adecuada para albergar al número de animales previstos, garantizando que haya suficiente espacio para el pastoreo y la rotación de los pastizales, lo que es crucial para la salud del suelo y la producción de forraje.

Infraestructura y cerramientos para ganado ovino

La infraestructura es un pilar en la gestión de cualquier explotación ganadera. Para el ganado ovino, es esencial contar con cerramientos adecuados que mantengan a los animales seguros y que faciliten el manejo diario. Estos cercados deben ser robustos, de materiales duraderos y diseñados para evitar el escape de las ovejas, así como para protegerlas de posibles depredadores. En mallas Galbis contamos en nuestro catálogo con las mallas ovejeras, muy utilizadas en cerramientos ganaderos. Están fabricadas en alambre galvanizado y se caracterizan por ser altamente resistentes. 

También es importante disponer de refugios o cobertizos donde los animales puedan resguardarse durante las inclemencias del tiempo. Además, áreas específicas para el manejo de la alimentación y el control sanitario, como corrales, salas de ordeño y almacenes, facilitan las operaciones diarias. 

Recursos naturales y sostenibilidad

El uso eficiente de los recursos naturales es esencial en la gestión ovina. Las explotaciones que priorizan la sostenibilidad buscan aprovechar al máximo los recursos locales, como los pastos, sin sobreexplotar el suelo. La rotación de pastizales es una práctica común que ayuda a evitar la erosión y a mantener la fertilidad del terreno.

 Además, el uso responsable del agua y la implementación de sistemas de riego adecuados contribuyen a optimizar la producción forrajera y a asegurar la disponibilidad de agua limpia para el ganado.

Alimentación del ganado ovino

La alimentación es uno de los factores más importantes en la gestión de una explotación ovina, ya que influye directamente en la productividad y salud del rebaño.

Tipos y mejores sistemas de alimentación:

Existen diversos sistemas de alimentación para el ganado ovino, que pueden variar según la época del año y las condiciones locales. En la mayoría de las explotaciones, los pastos naturales representan la base de la dieta del ganado ovino, proporcionando nutrientes esenciales. Sin embargo, este sistema de alimentación en campo se puede complementar eficazmente con el uso de comederos y tolvas.

Alimentación en el campo con comederos y tolvas:

El uso de material para ganado ovino como comederos y tolvas en el campo permite asegurar que el ganado tenga acceso a alimento de manera controlada y continua, sin depender exclusivamente de la disponibilidad de pasto. Estos dispositivos son especialmente útiles durante épocas de escasez o baja calidad del forraje natural, como en invierno o durante la sequía. Las tolvas facilitan el suministro de concentrados que aportan energía, proteínas y minerales, manteniendo el buen estado de salud y productivo de los animales.

Además, el uso de comederos ayuda a reducir el desperdicio de alimento y asegura una distribución uniforme entre todos los miembros del rebaño, evitando la competencia excesiva entre ellos. Este sistema no solo contribuye al bienestar animal, sino que también optimiza la eficiencia alimenticia de la explotación.

Suplementación con forrajes conservados y concentrados

Para las épocas en que la disponibilidad de pasto disminuye, como en invierno o durante sequías prolongadas, se suelen utilizar forrajes conservados como el heno o el ensilado, que aportan nutrientes esenciales cuando los pastos escasean. En sistemas más intensivos, también se recomienda la suplementación con concentrados para asegurar una buena producción de carne, leche o lana.

Sanidad y bienestar animal en explotaciones ovinas

El bienestar y la salud del ganado ovino son aspectos fundamentales que requieren una gestión proactiva y constante para prevenir enfermedades y garantizar el cumplimiento de las normativas de bienestar animal.

Principales enfermedades del ganado ovino

Las ovejas pueden ser susceptibles a diversas enfermedades que afectan su salud y productividad. Algunas de las enfermedades más comunes en el ganado ovino incluyen la enterotoxemia o "mal de los comederos", la podredumbre del casco, la ectima contagioso y las enfermedades parasitarias como la infestación por gusanos gastrointestinales. Estas patologías, si no se gestionan adecuadamente, pueden reducir la producción y aumentar la mortalidad en el rebaño.

Programas de vacunación y tratamientos preventivos

Una gestión sanitaria eficaz incluye la implementación de programas de vacunación que protejan al rebaño contra enfermedades infecciosas. Las vacunas contra la enterotoxemia, el tétanos y otras enfermedades son esenciales para prevenir brotes. Además, es recomendable llevar a cabo desparasitaciones regulares y realizar análisis de heces para controlar las cargas parasitarias en el rebaño. Los tratamientos preventivos juegan un papel fundamental en la reducción del uso de medicamentos curativos, mejorando así la salud general de los animales y reduciendo los costos sanitarios.

Normas de bienestar animal en ganadería ovina

El bienestar animal es un tema de creciente importancia en la gestión ganadera. Las normativas europeas y nacionales establecen directrices sobre el manejo ético del ganado, que incluyen garantizar que los animales tengan acceso a alimentación adecuada, agua fresca y condiciones de alojamiento que les permitan expresar comportamientos naturales. Además, se requiere que el ganado no sea sometido a estrés innecesario, y que las intervenciones como el esquileo o la manipulación del rebaño se realicen de manera respetuosa y segura.

Sostenibilidad en la gestión de una explotación de ganado ovino

La sostenibilidad es un aspecto clave en la gestión moderna de las explotaciones ganaderas, y la ovina no es la excepción.

Prácticas sostenibles en la ganadería ovina

Adoptar prácticas sostenibles en la explotación ovina no solo ayuda a reducir el impacto ambiental, sino que también mejora la eficiencia y rentabilidad a largo plazo. Algunas de estas prácticas incluyen la rotación de pastos para evitar la degradación del suelo, la reforestación de áreas no cultivables, el uso de energías renovables y el manejo adecuado de residuos orgánicos, que pueden reutilizarse como abono.

Otro enfoque importante es la gestión de la biodiversidad en la explotación, conservando hábitats naturales dentro de la finca, lo que contribuye a la preservación de especies autóctonas y mejora la resiliencia del ecosistema local.

Gestión eficiente de los recursos hídricos y energéticos

El agua es un recurso clave para el ganado ovino, por lo que su gestión eficiente es crucial. Las explotaciones sostenibles suelen implementar sistemas de captación y almacenamiento de agua de lluvia, así como sistemas de riego eficientes que minimicen el desperdicio. En cuanto a la energía, el uso de fuentes renovables, como la energía solar o eólica, permite a los ganaderos reducir su huella de carbono y los costos energéticos a largo plazo, haciéndolas más competitivas y responsables con el medio ambiente.

Conclusiones

La gestión de una explotación de ganado ovino implica un enfoque integral que abarca desde la elección de la ubicación y las infraestructuras, hasta la implementación de programas sanitarios y de bienestar animal, sin olvidar la importancia de la sostenibilidad. Una explotación bien gestionada no solo asegura la productividad y rentabilidad, sino que también contribuye a la conservación de los recursos naturales y al bienestar del rebaño. La clave del éxito está en la planificación, la adaptación a las necesidades del ganado y el respeto por el medio ambiente.

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