Diferencias entre malla de simple torsión y triple torsión

¿Qué es la malla de simple torsión?

La malla de simple torsión, también conocida como malla ciclónica, es ampliamente utilizada por su flexibilidad y facilidad de instalación. Fabricada generalmente con alambre galvanizado, esta malla se caracteriza por su tejido en forma de diamante, que le permite adaptarse a diferentes superficies y formas. Es una opción común en cercados residenciales, industriales y deportivos debido a su versatilidad y resistencia moderada a los impactos.

¿Qué es la malla de triple torsión?

Por otro lado, la malla de triple torsión, a menudo denominada malla de gallinero, es reconocida por su estructura más rígida y duradera. Esta malla se fabrica entrelazando alambres de acero, formando una estructura de malla hexagonal. Es especialmente efectiva para contener animales pequeños o para aplicaciones en agricultura, como protección de cultivos y árboles jóvenes. Su diseño robusto ofrece una resistencia superior frente a la deformación y los daños.

Comparativa de durabilidad y resistencia

Al comparar la durabilidad y resistencia, la malla de triple torsión suele superar a la de simple torsión. Su diseño hexagonal proporciona una mayor resistencia a la deformación y al desgaste. Por el contrario, la malla de simple torsión, aunque resistente, puede ceder más fácilmente bajo presión directa, lo que la hace menos idónea para entornos donde se requiere una alta resistencia a impactos o intentos de penetración.

A continuación, vemos el detalle de las diferencias en la siguiente tabla comparativa:

Proceso de Instalación de ambas mallas

En cuanto a la instalación, la malla de simple torsión es generalmente más fácil y rápida de instalar debido a su flexibilidad. Se adapta bien a terrenos irregulares y requiere menos soporte estructural. En cambio, la malla de triple torsión, debido a su rigidez, puede requerir una instalación más cuidadosa y un soporte más sólido, especialmente en terrenos desiguales o para aplicaciones de alta seguridad. A continuación, detallamos el proceso en cada caso:

Malla de simple torsión

1. Preparación del terreno: Limpia el área donde se instalará la malla, eliminando obstáculos y asegurando un terreno nivelado.
2. Colocación de postes: Instala los postes a intervalos regulares a lo largo del perímetro. La distancia entre postes puede variar, pero generalmente es de 2 a 3 metros.
3. Colocación de los alambres guía o de tensión.
4. Desenrollado de la malla: Desenrolla la malla atándola a los alambres guía a lo largo de los postes instalados.
5. Fijación de la malla: Comienza en un extremo, fija la malla al primer poste usando grapas o amarres de alambre. Continúa fijando la malla a lo largo de los postes.
6. Fijaciones finales: Realiza ajustes finales y asegura todas las conexiones.

Malla de triple torsión

Esta malla no se suele utilizar para cerramientos por sí sola, normalmente se ata a otra malla previamente instalada, ya se a cinegética o ganadera. En el caso de instalarse sola, estos son los pasos a seguir:

1. Instalación de postes: Los postes deben ser más robustos debido a la rigidez de la malla. Colócalos a intervalos regulares.
2. Colocación de los alambres guía o de tensión.
3. Despliegue de la malla: Despliega la malla de triple torsión a lo largo de los postes. Su rigidez puede requerir más esfuerzo para manipularla. Atar la malla a los alambres guía.
4. Fijación de la malla: Fija la malla a los postes, comenzando por un extremo. Debido a su estructura, puede ser necesario usar grapas más fuertes o un método de fijación más resistente.
5. Ajuste y reforzamiento: Asegúrate de que la malla esté bien tensada y reforzada, especialmente en las esquinas y puntos de unión.
6. Inspección y ajustes finales: Revisa toda la instalación para asegurar la tensión adecuada y la ausencia de puntos débiles.

¿Cómo afectan las condiciones ambientales a cada tipo de malla?

Ambos tipos de mallas responden de manera diferente a las condiciones ambientales. La malla de simple torsión, aunque tratada para resistir la corrosión, puede ser más susceptible a los daños causados por la exposición prolongada a ambientes húmedos o salinos. Por su parte, la malla de triple torsión, con su estructura más densa y uso de materiales más robustos, generalmente ofrece una mejor resistencia en condiciones adversas.

Factores clave en la selección de mallas

Al elegir entre malla de simple torsión y malla de triple torsión, es importante tener en cuenta varios factores para asegurarse de que la selección se ajusta a las necesidades específicas del proyecto. Estos factores incluyen:

1. Propósito del cercado: Determina si el cercado es para seguridad, contención de animales, delimitación de propiedades, etc.
2. Tipo de animales o uso: Considera el tamaño y tipo de animales que serán contenidos o si se usará para otros fines como cercados de seguridad o deportivos.
3. Condiciones del terreno: Evalúa si el terreno es irregular, inclinado o tiene otras características especiales que podrían influir en la elección de la malla.
4. Clima y exposición ambiental: Ten en cuenta las condiciones climáticas locales y la exposición a elementos como la humedad, la salinidad o la exposición solar directa.
5. Durabilidad y resistencia necesaria: Evalúa la necesidad de resistencia a impactos, presión, y durabilidad a largo plazo.
6. Facilidad de instalación y mantenimiento: Considera la facilidad con la que se puede instalar y mantener cada tipo de malla.
7. Presupuesto: Ten en cuenta el costo inicial de la malla y los gastos de instalación, así como los costos de mantenimiento a largo plazo.
8. Aspecto estético: Si el aspecto visual es una consideración importante, evalúa cuál de las dos opciones se adapta mejor estéticamente al entorno.

Al evaluar estos factores, podrás tomar una decisión informada sobre el tipo de malla que mejor se adapta a tus necesidades específicas, asegurando así una inversión eficiente y adecuada para tu proyecto de cercado.